Páginas

2 dic 2010

Por qué vamos al Cerro de los Angeles

Por qué vamos al Cerro de los Angeles

En la víspera de la festividad de Cristo Rey tuve el honor de dirigir unas breves palabras a los carlistas concentrados en la explanada del Cerro de los Ángeles. Lo que quiero contar a los lectores de Ahora información se parece a lo que dije entonces, megáfono en mano, y a lo que he podido pensar después. Allí, aquella mañana radiante de sábado, en el centro geográfico de la Península, estaban de pie, felices de encontrarse, cientos de personas, hombres, mujeres y niños, familias enteras. Habían venido de toda España para celebrar el Día de la Comunión Tradicionalista Carlista como quien acude a una boda, o a una romería antigua. Para quien no conozca a los carlistas decir que aquello era una reunión política quizás resulte un tanto extraño. Siempre hemos sido más un pueblo que un partido. Por eso aún hoy, en el tercer siglo de su existencia, sigue el carlismo pareciendo más una comunión de familias libres que una asamblea de abogados. A lo largo del día hubo Misa, comida, música, brindis... y boinas rojas y blancas, convivencia y testimonio.
Digo que la ocasión era política porque los carlistas, al celebrar cada noviembre nuestro principal acto anual en el Cerro de los Ángeles, al pie del monumento al Sagrado Corazón de Jesús, demostramos en cierto modo ser más “cerristas” que “angelistas”. No vamos solamente a rezar -que también-. Vamos para asumir el compromiso que nos ha tocado. La pesadísima carga de ser, sin mérito alguno por nuestra parte, los herederos de la auténtica tradición política española. Dentro de esa herencia se incluye, naturalmente, la invocación del “Nada sin Dios” como primer punto de nuestro viejo lema y por tanto -imposible olvidarlo en el Cerro- la obligación de asumir la Consagración de España al Corazón de Cristo. Consagración no de la Iglesia española, sino de España. De la vida social y política, de las familias, pueblos, ciudades, regiones, instituciones y cuerpos sociales diversos que constituyen nuestra Patria. No nos acompleja la desproporción que existe entre nuestras pobres fuerzas y la inmensa tarea de representar a todas las Españas. Igual que los conquistadores de otras épocas, que con apenas un puñado de leales se atrevían a tomar posesión de océanos y continentes para la Monarquía Católica, los carlistas del siglo XXI, asumimos los deberes y derechos que significa esta Consagración e invitamos a todos los españoles de bien a sumarse a la misma.
En el Cerro de los Angeles hay dos monumentos: las ruinas del primero, que fuera levantado por Alfonso de Borbón y el segundo, nuevo, erigido por Francisco Franco. Entre los dos, junto a la cripta de la Basílica nueva, se conserva un pequeña capilla funeraria en la que reposan los restos de varios carlistas, requetés, que murieron defendiendo el Cerro en la persecución revolucionaria de los años 30.
Es bien conocido que ninguno de ambos jefes de Estado y promotores de tan benéfica “obra pública” es santo de nuestra devoción. Y ello sin embargo no impide que consideremos el Cerro tan “nuestro” como si fuera el mismísimo Escorial. No es propio de los carlistas descalificar con etiquetas partidistas las obras buenas que hayan podido realizar en algún momento nuestros adversarios. Por el contrario, la concepción política que nos enseñaron nuestros mayores siempre ha sido, y será, la del servicio al bien común, por encima de cualquier interés de partido o grupo. Esta vocación de servicio es lo que hace de la Comunión un grupo humano esencialmente abierto y transparente. Y es lo que de hecho, al tiempo que nos aleja de cualquier autocomplacencia, nos está haciendo crecer convirtiendo nuestra presencia en el Cerro, año tras año, en un signo de esperanza que florece en medio de la frustración política de nuestro tiempo.

F. Javier Garisoain Otero
Secretario General de la CTC

PUBLICADO EN AHORA INFORMACIÓN. DICIEMBRE 2010

1 nov 2010

PRESENTACION, POSOLOGÍA E INDICACIONES: (presentación de antiguo blog)

 Amable e incauto lector,


Este libro-blog que estás leyendo es un refrito cocinado gracias a una serie de “cartas al director” que desde el año 88, -sulfurado unas veces, sereno otras- fuí enviando a diversos periódicos y revistas (*). El resultado es un “pupurri”, un revuelto, una menestra, una papilla formada por pocas ideas, sólidos principios, discutibles opiniones, sonoras protestas y algún que otro sueño surrealista.
Deseo en primer lugar que la lectura de estos articulillos, -sea en pequeñas dosis o como tratamiento intensivo- te resulte saludable y entretenida. También deseo que bajo sus ingredientes descoyuntados, tras esta vidriera de ideas aparentemente inconexas, puedas descubrir algunas verdades de esas que yo no me he inventado. Aquí no hay ni trampa ni cartón: confieso que soy un carca y un reaccionario (**). A veces me he creído en el deber de defender a la Verdad, -como si la verdad necesitara de uno- y por eso me ha dado, a veces, por escribir en ese sentido. Te ruego, por tanto, que si descubres en estas páginas -¡Dios no lo quiera!- sombra de error, mancha de herejía, o silogismo incompatible con la sana filosofía de Santo Tomás, me lo hagas saber y podamos así reparar el daño. Mira que lo aviso antes: ni soy el típico autor progre ni voy a pontificar desde la nada como hacen ellos. A lo mejor pontifico un poquitín, pero es que puestos a pontificar mejor será que lo hagamos quienes somos amigos del Sumo Pontífice ¿no? Ser católico de los de Ratzinger tiene una ventaja y consiste en evitarse contradicciones. Yo no diré un día, por ejemplo, que la familia es lo más maravilloso del mundo, para afirmar al día siguiente que es una antidemocrática estructura judeo-cristiana, causa de todos nuestros males. Por ejemplo.

Otros “intelectuales” -esa gente que piensa- se mueren por subir al olimpo de la indiferencia. Se creen los pedagogos del pueblo, los ilustrados de siempre, y nos explican -sin mojarse- las pequeñas verdades particulares de los hombres que han cambiado el mundo. Yo, en cambio, escastillado en una torre de dogmas, no puedo adular todo lo que quisiera. Soy capaz de comprender y hasta de tolerar a los  coherentes; no se me caen los anillos por dialogar con quienes, respetuosos, no creen lo que yo creo. Lo que no soporto fácilmente es el retorcimiento sinuoso de la mentira o las genialidades filosóficas sin raíces. Por eso escribo de vez en cuando. No soy ni profeta de mí mismo, ni intelectual, ni he nacido para ilustrar a las masas incultas. Soy -prefiero encasillarme yo mismo- un simple católico que cree a pies juntillas todo lo que dicen el Credo, el Catecismo y las Encíclicas. Y punto. Así pues, querido lector, ya sabes a qué atenerte. Que aproveche

F. Javier Garisoain Otero


Advertencia para el público feminista o contaminado de: Cuando a lo largo del libro se lean palabras como “niños”, “trabajadores”, “perros”, etc. deberá tenerse en cuenta que no hay en dichas palabras intención alguna -en principio- de excluir al género femenino. (¡Es que hay que explicarlo todo!)

(*) Con mayor o menor fortuna, "tal cual" unas veces y mutiladas otras han aparecido en: ABC, Ahora información, Deia, Diario de Navarra, Diario de Noticias, Egin, El Alcázar, El Correo Español, El Mundo, El País, El Semanal, Faro de Vigo, Hispanidad (digital), La Razón, Reino de Cristo, Revista Loiola, Vanguardia Universitaria... y algunos otros.

(**) Reacccionar: “8. Quím. Actuar una sustancia en combinación con otra produciendo otra nueva.” (Definición de la 21ª Ed. del Diccionario de la RAE).

7 sept 2010

Lecciones de etica periodística: Terra.es explicando el carlismo a sus lectores

A continuación va el enlace del paupérrimo mini-reportaje que han publicado en TERRA.ES sobre el carlismo en la actualidad. Más abajo copio lo que envié al periodista. Para que aprendamos a hilar fino en lo que se dice y no nos sorprenda luego el resultado.
En Xto. Rey,
Javier Garisoain


******************

> -Representantes políticos
Yo puedo hablar como secretario general de la Comunión Tradicionalista Carlista (CTC) cuyo máximo órgano entre congresos es su Junta de Gobierno, que preside Dña. María Cuervo-Arango. Si al decir "representantes políticos" se refieren a cargos electos (concejales, diputados, etc) en este momento la CTC no tiene ninguno elegido con estas siglas.


> -Visión general de la situación política, económica y social de España en
> su conjunto (y de su ámbito territorial en el caso de los partidos de
> ámbito autonómico)
Desde nuestro punto de vista la situación actual de España es de decadencia pero no solo por la crisis económica actual, ni por culpa de Rodríguez Zapatero. La crisis social, moral y de toda clase que sufre España viene de muy lejos, desde que los españoles hemos ido olvidando nuestras raíces y el esquema constitucional de la España auténtica que se resume en el lema de Dios, Patria, Fueros, Rey.


> -Con qué partidos se ha pactado o se estaría dispuesto a pactar
De cara a posibles alianzas electorales nosotros estamos dispuestos a pactar con cualquier grupo que se comprometa a respetar el mínimo de los llamados cuatro principios no negociables": el derecho a la vida, la familia como Dios manda, la libertad de educación y el bien común.

> -Fotografías 
(Pueden encontrar fotografías diversas en nuestra web: www.carlistas.es. Si necesitan alguna específica pueden solicitarla en la dirección:organizacion@carlistas.es)


> -Campañas políticas (vídeos electorales, si pueden consultarse vía web o
> pueden enviárnoslos o se pueden descargar de algún servidor)
(También pueden consultarse en la web: www.carlistas.es)

> -Ideología
Nosotros rechazamos la misma palabra "ideología" como motor de la acción política. Las ideologías, ya sean de derecha o de izquierda, son visiones parciales o reduccionistas de la realidad que hacen que los políticos se dediquen a luchas estériles unos contra otros en vez de esforzarse por servir al bien común y a la realidad. Nuestro pensamiento político se basa en el de la España "de siempre", el de la tradición política española, el de las Cortes y los ayuntamientos que se fueron perfeccionando desde la Edad Media, en la Doctrina Social Católica, en la idea de una Monarquía al servicio de toda la sociedad y no de un partido. 

> -Programa
El esquema de nuestro programa político pueden descargarlo en este enlace:
http://www.carlistas.es/quienes_somos0.html

> -Número de afiliados
Tenemos cientos de afiliados y miles de simpatizantes repartidos por toda España organizados en juntas y delegaciones.

> -Resultados electorales
En las elecciones generales de 2008 presentamos al Senado un candidato en cada una de las circunscripciones españolas y sumamos un total de 45.000 votos.


> -Expectativas de cara a las próximas elecciones
Nuestra primera opción es seguir negociando con otros grupos para tratar de presentar candidaturas amplias en torno a los mencionados "principios no negociables". Por nuestra parte vamos a hacer todo lo posible en este sentido pero si ese objetivo no se consigue nos presentaremos en solitario, posiblemente sea otra vez al senado en las generales.


> -Opinión de los otros partidos carlistas (con diferente posición
> ideológica) ¿Es posible una reunificación de todos los partidos carlistas?
La verdadera unidad del carlismo se produjo en el año 1986 con la reconstitución de la Comunión Tradicionalista Carlista. A partir de entonces solo existen dos partidos políticos que lleven el nombre de "carlista": La CTC, que agrupa a la mayoría de los carlistas y cuyo ideario sigue siendo el de siempre (el de Dios, Patria, Fueros, Rey) y el Partido Carlista en el que militan los herederos de las teorías socialistas autogestionarias que lideró don Carlos Hugo en los años 70. Mientras ellos se mantengan tan alejados del ideario "de siempre" creemos que será difícil cualquier acercamiento. A pesar de todo procuramos mantener con ellos una relación cordial en especial en la defensa del patrimonio histórico común. 


> -Partidos, sociedades, medios de comunicación, empresas y fundaciones
> hermanados, asociados o vinculados al partido (enlaces, direcciones, datos
> de contacto)
Además de la misma CTC y sus delegaciones, que por razones tácticas está registrada como partido político, existen otras entidades tradicionalistas con las que compartimos el mismo ideario entre las que podríamos mencionar: el Foro Alfonso Carlos, la Asociación juvenil Cruz de Borgoña, el Foro Santo Tomás Moro, la revista Ahora información, el Consejo de Historia y Cultura Tradicionalista, la asociación Cruz de San Andrés por la Vida y la Familia, etc. Además existen numerosos círculos tradicionalistas de ámbito local o regional en Barcelona, Vizcaya (en Bilbao y en Ermua), Madrid, Valencia (en la capital y en Liria), Baleares (Soller), etc.  Desde nuestra web (www.carlistas.es) puede accederse a las páginas web de la mayoría de estas entidades.


> -Reacción muerte Carlos Hugo (opinión de él, de su vida, de su ideología)
> -Ídem de Sixto de Borbón
> -Opinión Rey Juan Carlos I
La posición de la Junta de Gobierno de la CTC ante estas personas está fijada en las últimas declaraciones que hemos difundido con ocasión del fallecimiento de don Carlos Hugo. Pueden ver la nota íntegra en este enlace:
http://www.carlistas.es/detalle_nota.php?ide=581


> -Tema de la actual “orfandad” del carlismo (posibles o futuribles
> sucesores/aspirantes carlistas)
Nuestra posición sobre esta cuestión quedó fijada en el Congreso de la Unidad celebrado en 1986 a partir del cual cada carlista puede mantener en su fuero interno sus preferencias personales acerca de cuál sería la solución teórica a la cuestión legitimista. En lo que estamos todos de acuerdo es que la dinastía que va de Carlos V a Alfonso Carlos I es la de los reyes legítimos de España. También estamos de acuerdo en no reconocer la legitimidad como rey del actual Jefe del Estado. Estamos pues, al igual que todos los españoles, huérfanos de un rey legítimo pero eso no supone que renunciemos a seguir siendo monárquicos y legitimistas. La solución al problema dinástico es bastante compleja porque requiere que exista una persona (una familia real más bien) que reivindique con seriedad y prudencia tanto la legitimidad de origen como la de ejercicio. Hoy por hoy no existe esa persona o familia así que en la CTC trabajamos en la medida de nuestras posibilidades por una sociedad tradicional con la esperanza de verla algún día encabezada por un rey tradicional.

Javier Garisoain 
Secretario General de la CTC

21 ago 2010

HISPANIDAD: CTC: defendemos la monarquía católica tradicional


CTC: defendemos la monarquía católica tradicional

El reciente fallecimiento de don Carlos Hugo de Borbón-Parma está generando en la prensa nacional e internacional una serie de noticias y comentarios acerca del carlismo que pueden resultar, en parte, contradictorios y confusos. Ante esta situación, la Junta de Gobierno de la Comunión Tradicionalista Carlista, organización política que agrupa a la mayoría de los carlistas, se ve obligada a realizar las siguientes declaraciones:

Hispanidad, viernes, 20 de agosto de 2010

+ 19 de agosto de 2010

DECLARACIONES DE LA JUNTA DE GOBIERNO DE LA CTC ANTE EL FALLECIMIENTO DE DON CARLOS HUGO DE BORBON-PARMA

1º. Don Carlos Hugo llegó a ser, en los años 60, una verdadera esperanza para muchos carlistas y españoles. Pero aquella ilusión se vió frustrada cuando don Carlos Hugo, adoptando una posición política incompatible con la ortodoxia carlista condensada en el lema de "Dios - Patria - Fueros - Rey", encabezó una grave desviación ideológica de la que nunca quiso rectificar. Este hecho, sumado a otros que sería complejo resumir, provocaron una grave crisis en el Carlismo que empezó a ser superada en 1986, gracias a la reconstitución de la Comunión Tradicionalista Carlista. En la actualidad no existe ningún vínculo político entre el carlismo organizado en esta Comunión y la familia Borbón-Parma.

2º. A la hora de la muerte no hay adversarios. El alejamiento en lo político que acabamos de describir no impide que los carlistas, a título personal, y en virtud de unos lazos afectivos, se unan a la familia Borbón-Parma en el dolor por esta pérdida elevando oraciones por el eterno descanso del difunto.

3º. Como responsables de la Comunión Tradicionalista reafirmamos, una vez más, nuestras convicciones monárquicas y legitimistas. Consideramos que la monarquía católica tradicional es el régimen político que más conviene a España. Pero no podemos reconocer la legitimidad de quienes han manipulado la institución monárquica poniéndola al servicio de la revolución. En consecuencia, la actual orfandad dinástica que sufrimos junto a todos los españoles no nos exime del deber de trabajar por una sociedad tradicional, para que un día, cuando Dios quiera, sea posible un rey tradicional. A esta tarea social y política convocamos a todos los españoles de buena voluntad.

JUNTA DE GOBIERNO DE LA COMUNION TRADICIONALISTA CARLISTA

María Cuervo-Arango (presidenta), Javier Garisoain (secretario general), Domingo Fal-Conde, Carlos Ibáñez Estévez, Carlos Ibáñez Quintana, Enrique Izquierdo, Javier López, Javier Zazu, Félix Zorrilla, Jesús Blasco, José Fermín Garralda, Conrad López, Manuel Onrubia, Carlos Ram de Viu y Jose María Salvo.www.carlistas.es

PUBLICADO EN HISPANIDAD