Páginas

21 dic 2020

Se cumplieron las profecías políticas del Carlismo. ¿Y ahora qué?



Los carlistas tenemos un problema. Llevamos toda la vida, pero especialmente el último medio siglo en plan profeta, anunciando las desgracias que iban a ir viniendo. Y todo se ha cumplido. Anunciamos, como si fuera una escalera previsible de calamidades, una tras otra, el divorcio, el aborto, la eutanasia, la destrucción de la familia, el aberrosexualismo, la venta de España, el sometimiento general a la cultura anglosajona, el avance de los separatismos, la perdida de libertades, la despoblación, la crisis rural, y la urbana, la inmigración desordenada, la perdida de las tradiciones, la manipulación de las culturas y lenguas regionales, la droga y otras adicciones, la pornografía, la crisis de autoridad, el totalitarismo en la enseñanza, el feísmo, la cultura de la subvención, la manipulación de la historia, el laicismo, el anticlericalismo, la cristofobia, la descristianización sistemática... Y todo se ha ido cumpliendo, una cosa ha llevado a la otra porque los males nunca vienen solos. Porque todos ellos están íntimamente relacionados. 

La frase más repetida por los carlistas en las últimas décadas ha sido esa tan manida de "Tronos a las premisas, cadalsos a las consecuencias". Es una sentencia que recoge a la perfección la incoherencia de los que se iban lamentando por cada nuevo peldaño en la degradación general de las cosas sin querer reconocer que, paso a paso, seguíamos descendiendo porque en su momento alguien decidió que había que bajar. 

Ahora ya pocos avisos nos quedan. ¿La tercera república?, ¿la persecución abierta?, ¿el modelo chino de totalitarismo?... Todo ello, aunque terrible, no dejaría de ser una vuelta de tuerca más en una sucesión de hechos lógicamente perversa. Los que han escuchado la voz del tradicionalismo clamando en el desierto ya saben qué cabe esperar. Los que se rieron de nosotros han sido barridos por la ola. Por nuestra parte de nada nos serviría, sino para engordar el orgullo, exigir que se nos reconociera que teníamos razón. Sí, por supuesto que la teníamos... ¿pero ahora qué?

Ahora se abre un tiempo nuevo. La travesía del desierto toca a su fin. ¿Para llegar a la Tierra Prometida? Si, al final sí, por supuesto. Estamos llenos de esperanza. Pero no somos ingenuos. Después del desierto vienen las tribulaciones, la lucha contra los filisteos, el combate de David contra Goliat, y también la resistencia martirial de los Macabeos.

Llegan tiempos de acción mas que de precaución. Todos nuestros avisos son humo y llegan tarde. Ahora ya no es momento de más profecías políticas sino de organizar la resistencia y la reacción. Si has leído hasta aquí... quienquiera que seas, y estás donde estés, crea un núcleo de resistencia, una guerrilla política, social, cultural o, simplemente, familiar. Allí donde perviva un núcleo carlista ponte a su servicio. La Comunión Tradicionalista Carlista permanece vigilante y se está preparando, con humildad, con constancia, con toda su experiencia. Si llegas ahora se bienvenido. No será fácil. Ten ánimo, ten fe, haz lo que debas... Y suceda lo que Dios quiera.

16 dic 2020

¿Así se defiende el bable?


Noreña, Principado de Asturias, 2020.

Hay amores que matan. A estos extremos de subnormalidad pueden llevarnos los partidos políticos para aparentar que hacen algo por su trocito de tarta cuando realmente lo que hacen es dejarla a la altura del barro. Este tipo de señalética idiota hace más daño a la conservación del bable asturiano y a la imagen de Asturias que cualquier otra cosa. Llenando las calles de letras innecesarias lo que consiguen es presentar al bable como un capricho estúpido. 

La defensa de los idiomas minoritarios o de los dialectos se tendría que hacer de otra forma, no empeñándose en las señales. Haciendo cosas inteligentes y no esas mamarrachadas. Convocando concursos literarios, por ejemplo, o ayudando tal vez a algún programa de radio pero no con estas mamarrachadas. 

Y es que además la consecuencia política ya saben cuál es: lograr un desapego cada vez mayor de la idea de España entre los jóvenes y alentar a pirados como los que reivindican esa fantasmal "república asturiana" de la pegatina. 

Como nos pongamos todos los españoles -los gaditanos por poner un ejemplo- a transcribir nuestras diferentes hablas vamos a necesitar muchos muchos letreros. 

Leyendo discursos navideños


Hace unos días corría como la pólvora en los móviles de los católicos, ansiosos por compartir alguna buena noticia, el discurso que con voz titubeante leía Isabel Díaz Ayuso para inaugurar el belén madrileño de la Puerta del Sol. 

El contenido de sus palabras no cuadraba mucho con lo que el partido político de esta importante política del PP viene haciendo desde hace décadas para descristianizar España. Pero es igual. Que la realidad no nos fastidie más de la cuenta. Algunos se llevarían un chasco si supieran que la señora Ayuso decía cosas como estas en una entrevista que publicó el diario El País en mayo de 2019: 

"Respecto al aborto soy partidaria de que cada mujer decida qué quiere hacer con su vida". 

"De niña perdí la fe, a los nueve años, a la edad de hacer la comunión, más o menos."

Así que mejor no emocionarse tanto. Aplaudan el mensaje. Dios escribe derecho también con aquellos que no tendrían ninguna autoridad si no se le hubiera dado de lo alto. Alégrense de cada paso que se de en la buena dirección, pero permanezcan atentos a los engaños de los partidos malminoristas. Por mi parte empezaré a creer en la sinceridad de esta señora política cuando lea un discurso similar en el próximo Congreso nacional del PP.

Otro a quien también se nota que le han escrito el discurso es al presidente (de momento) de Estados Unidos. El contenido es impresionante, digno de un cardenal de la Iglesia. Lo que pasa es que no lo lee igual que Ayuso... es como si estuviera pidiendo un milagro. 


https://youtu.be/FmGiIRHrHC0

Y hablando de políticos y religión... Ahora mismo sería un buen momento para recordar que NO se puede excomulgar a los políticos que van a traer la eutanasia. Por una simple razón y es que ya quedaron excomulgados antes por traer el aborto. 

1 dic 2020

Opiniones deleznables


Siempre he pensado que existen opiniones equivocadas, que sobre gustos no hay nada escrito aunque hay gustos que merecen palos. Solo aquel que cree en la existencia de verdades puede tener el privilegio de denunciar los errores y las mentiras. Siempre me han enseñado que lo que son respetables son las personas y no lo que estas puedan decir; porque hay que maldecir al pecado, no al pecador. Sin embargo, hasta ahora, el mantra típico de las ideologías progres era ese que decía que "todas las opiniones son respetables".

¿Decían eso por convencimiento, o más bien como táctica para ir haciendo respetables sus errores? 

Por fin tenemos la respuesta. Una vez alcanzada la hegemonía cultural o, de alguna forma, todos los resortes del poder, la mezcolanza ideológica progre ha dado la vuelta a la tortilla. Se acabó la respetabilidad de las minorías. A partir de ahora ya sólo sirve el pensamiento único, la voz de la OMS, lo que diga la prensa oficial, las agencias de verificación o las empresas de Cupertino. 

Ayer mismo, uno de esos gurús progres que lo mismo sirven para profesor de filosofía, que para candidato del PNV, que para asesor de la "marca España" afirmaba en un tuit que existen "opiniones deleznables". Es reconfortante saber que empezamos a coincidir en algo. Pero al mismo tiempo resulta alarmante entender que aquella respetabilidad que exigieron para sus ideas cuando eran marginales ya no sirve ahora para nosotros, los apestados que ya no sumamos la mitad mas uno. 

Acabamos de asistir a la enésima manifestación multitudinaria contra la enésima ley de educación. Y lo único que queda en el aire es una pregunta: ¿para qué ha servido? En una familia normal, cuando el padre decide que vamos de excursión, aunque cuente con el respaldo de la mayoría, sabe que tiene que negociar si se alza alguna voz en contra. Porque su aspiración no es satisfacer a la mayoría sino tener a toda su gente contenta. ¿Qué suelen hacer en cambio los gobiernos con las manifestaciones? Ignorarlas. Y cuando eso no es posible ridiculizarlas. 

El respeto a las minorías ha muerto. Ahora todo lo que no sea mayoritario entra en la categoría de bulo, de fake o de discurso de odio. Los que hemos quedado fuera de esa mayoría triunfante ya no tenemos ideas, tenemos fobias. Ya no somos una diversidad protegible sino una anomalía a extinguir. Nuestras opiniones ya no son respetables. Son deleznables.

26 nov 2020

Cristo Rey: la estrategia



Llevamos tiempo los carlistas discutiendo sobre estrategias a seguir. Nuestro proyectado "plan estratégico" se ha ralentizado -como tantas cosas de las de antes del virus- esperando el momento en que se pueda discutir y contrastar como se debe, hablando en persona, mirándose a la cara. Pero de pronto, providencialmente, llega a mis manos un viejo folleto del Círculo Familiar Vírgen del Camino. Es una conferencia de Federico Wilhelmsen titulada "La soberanía de Cristo... o el caos". Lo releo, y pienso que ahí mismo, en esas pocas humildes páginas está ya escrito, desde hace medio siglo, nuestro "plan estratégico". El profesor Wilhelmsen lo escribió en 1967, pensando en los próximos 100 años y en la lucha global tal como la veía venir entonces. 

En su opinión, y eso lo decía hace 50 años, "la Revolución ha alcanzado su culminación". Ha producido un vacío moral que, inevitablemente acabará por ser llenado. Y o lo llenamos nosotros, los defensores del orden católico, o lo llenará una tiranía nunca vista.

Lean esta voz profética si quieren saber en qué pensamos algunos cuando gritamos ¡Viva Cristo Rey": 

"LUCHEMOS POR UN ORDEN CATÓLICO

... No debemos la menor fidelidad al Orden secularista y Liberal Occidental. Destruyó el Orden Católico y lo hizo asesinando a nuestros antepasados en una nación tras otra en Europa y Sud América. Dejemos que la democracia secular se cueza en su propia salsa, como se está cociendo hoy. Mientras tanto, mantengamos nuestra pólvora seca hasta que Dios mediante el momento oportuno emerja en el horizonte de la historia y nos exija actuar en nombre de Cristo Rey. No perdamos el tiempo y energías apuntalando el Estado moderno. Hagamos más bien, lo posible para que se desmorone. (Uso el término "Estado" aquí como definido anteriormente en contraposición con el de "Gobierno"). Evitemos también, en pensamiento y palabra, cualquier sugerencia que haga pensar que defendemos el Orden del siglo XIX en el aspecto político y económico: en ambas dimensiones fueron enemigos de la Iglesia y por tanto son nuestros enemigos. Somos enemigos de toda clase de Liberalismo, económico o político.

Aunque este trabajo no se ha dirigido formalmente a la crisis dentro de la cual la Iglesia se halla hoy día, podemos afirmar con seguridad que la Iglesia emergerá de este terrible momento histórico, libre de los débiles y con las grasas quemadas. Es posible que esto no suceda en vida de los que están leyendo estas palabras, pero sucederá ciertamente dentro de los próximos cien años. Mientras tanto seamos rebeldes a la Ciudad Secular, y así gocemos de la dulzura de la rebelión legitima. Seamos los últimos defensores en nuestro saludo a solo un Soberano, nuestro Señor; Cristo Rey. Ignoremos, por tanto, luchemos, esquivemos, socavemos, cualquier Autoridad que suplante o ignore la Suya. En términos existenciales esto significa que nosotros debemos adherirnos a la Autoridad de Roma, que es la de Cristo, contra clérigos y prelados si fuese necesario.

Edifiquemos, pues, un Poder para la Autoridad de Pedro capaz de actuar en cualquier dimensión de la vida y aun de morir mártires, si fuera necesario. Esto nos arrojará de la sociedad refinada a una selva donde no estaremos fortificados ni por instituciones ni por el peso de prejuicios con los cuales toda sociedad se mantiene en existencia. Estamos perdiendo nuestras universidades hoy día Wester, Notre Dame, St. Louis, San Francisco. Déjenlas ir. No podemos desenfundar nuestras espadas contra un mar de algodón de azúcar. Estamos perdiendo nuestros clérigos a miles. Déjenlos ir. Que Dios tenga piedad de sus almas, pero no queremos que "administren" las nuestras. Nuestra liturgia está en ruinas. Nosotros nos adherimos a la Cosa Esencial: la Presencia Real en el Altar, Cristo Rey, Señor Eucarístico. Y al volver así nuestras espaldas a la respetabilidad, seremos temidos cuando acechemos en la selva esperando nuestra oportunidad en el tiempo, temidos como lo son los Guardias Rojos en China. Y Pedro, al principio temeroso de nosotros, vendrá con el tiempo a llamarnos, sus propios soldados, el Poder de su Autoridad, la Espada de Dios. Entonces llenaremos el vacío, barreremos los escombros y así crearemos un nuevo Orden Católico sobre este Caos. (Esto será fácil de hacer porque nuestro enemigo no tiene arrestos). Y si ello no ocurriese, y no fuéramos temidos, si dudamos por el respeto humano, si encubrimos nuestra cobardía bajo la rúbrica de una falsa prudencia, si esperamos la llegada de un nuevo Atanasio en lugar de formarnos en su espíritu, entonces habremos dejado escapar esta nuestra última oportunidad en la historia. Me aterroriza pensar qué barbarie caería entonces sobre el mundo. " 

¿Demasiado optimista? No lo creo. La Historia es de aquellos que saben qué es lo que hay que hacer. Y en última instancia, de Aquél que lo sabe todo, y lo hace todo. 

15 nov 2020

¡Libertad!

Estamos llegando a un punto en el que vamos a tener que entendernos -sí o sí-  todos los que queremos libertad para vivir. La tiranía estilo chino avanza a marchas forzadas, a golpe de decretos y utilizando todos los recursos que la partitocracia ha entregado a los gobernantes. Recursos que, en la mayoría de los casos, suponen la sangría vía impuestos y multas del 50% de lo que gana un contribuyente medio.

Diciendo esto no me acerco al liberalismo. Al revés. Siempre he pensado que liberalismo es a libertad como carterismo a cartera. El liberalismo no tiene nada que ver con el recto ejercicio de la libertad. Esa ideología irrumpió hace 200 años en la historia de la Cristiandad occidental para proponer la adoración de la diosa libertad. Pero la libertad no se adora. Se usa. Y es para todos, no solo para aquellos que puedan pagársela. Por eso aquella falsa liberación abrió las puertas a nuevas opresiones.

Ahora mismo, lo que está llegando con el Nuevo Orden Mundial es una tiranía de amos liberales y plebe comunista. Un mundo en el que no hay sitio para las familias, los pequeños propietarios o las clases medias. Ideólogos millonarios que viven engañando a un populacho cada vez más esclavizado. Su progresismo consiste en el retorno a un paganismo precristiano que cambia el culto a Dios por la adoración al emperador. Y que con ello supone una vuelta a la esclavitud generalizada. Porque las antiguas termas se construían con esclavos, pero las catedrales fueron obra de hombres libres. 

Es el momento de alzar de nuevo la bandera de la libertad verdadera. La que surge de la Verdad, el Bien y la Belleza. Es el momento de resistir cueste lo que cueste a los nuevos tiranos. En esta lucha cuenten con los carlistas. 

10 nov 2020

Los ladridos del Diario de Noticias contra la memoria de la Navarra del 36


Esto lo escribí hace cinco años. Y hoy precisamente vuelve esta historia a plena actualidad.

“Una preciosa carta de nuestro Arzobispo, Francisco Pérez. Y que se publica en La Verdad ilustrada con una imagen de la segunda cúpula de España: la del Monumento de Navarra a sus Muertos en la Cruzada.
Este templo cuya parte superior gestiona actualmente el ayuntamiento de Pamplona… y que no saben que hacer con él. Hay que ver lo nerviosos que se ponen los de Bildu y todos los progres en general cada vez que se les recuerda que en el 36 Navarra, demostrando de forma heroica su LIBERTAD, decidió levantarse en armas contra un gobierno tiránico.”

Digo que vuelve a la actualidad porque arrecian de nuevo las presiones al clero desde el Diario de Noticias y otros medios anticatólicos para que se siga tratando como apestados a los miembros de la Hermandad de Caballeros Voluntarios de la Cruz. Una Hermandad canónica, fundada por excombatientes católicos y bajo el impulso del entonces obispo de Pamplona don Marcelino Olaechea (en proceso de beatificación) para -nada más y nada menos- mantener convenientemente santificado y depurado de miserias humanas el verdadero espíritu de cruzada, el auténtico espíritu macabeico que inspiró a gran parte de los sublevados en julio del 36. La Hermandad que inició en 1940 las famosas “Javieradas”. Hermandad de la que he tenido el privilegio de ser Caballero Prior durante unos años y en cuyo mandato, de acuerdo con el entonces arzobispo don Fernando Sebastián, fueron actualizadas sus Reglas.

Después de la gran cesión que supuso la donación del Monumento de Navarra a sus Muertos en la Cruzada (la segunda cúpula de España) -con escasas seguridades jurídicas- al Ayuntamiento; después de que ello llegara a propiciar el mayor sacrilegio de la historia reciente de España con la famosa exposición blasfema del pobre diablo Abel Azcona; después de la indigna exhumación -contra el deseo de la mayoría de los familiares- de los difuntos que reposaban en la cripta… ahora quieren prohibir a la Hermandad que mantenga el culto en su sede -que no es mas que una catacumba- rezando por sus muertos.

Sus muertos, los muertos “por Dios y por España” que no son solo “nuestros” muertos porque deberían ser honrados y recordados con respeto por todos los cristianos de Navarra y de España, porque gracias a ellos, a su sacrificio, se libró a Navarra y a España de una amenaza cierta de tiranía anticristiana. ¿Qué hubiera sido de Navarra si no hubiera sido por la victoria de nuestros modernos cruzados? Aquellos que hemos conocido, nuestros mayores que fundaron la Hermandad, por ejemplo, no se alzaron por ambiciones ni por impulsos ideológicos sino en un movimiento defensivo, con plena libertad, siguiendo el llamamiento de la Diputación Foral y contra un gobierno que consideraron entonces ilegítimo.

Si no hubiera sido por su victoria ¿habría existido un renacer religioso en Navarra?, ¿habrían salido de las familias navarras los miles y miles de misioneros navarros muchos de los cuales siguen todavía repartidos por todo el mundo? De bien nacidos es ser agradecido y Navarra, la opulenta y orgullosa Navarra del siglo XXI no lo está siendo con sus mayores porque asiste silenciosa y amedrentada por los ladridos que se leen en el Diario de Noticias.

2 nov 2020

La Hispanidad, un proyecto político

Algo está cambiando poco a poco en torno al 12 de octubre. El ideal de la Hispanidad -que no puede ser sino el de una Hispanidad católica- está propagándose en miles de almas hermanas como alternativa a las miserias políticas y a los problemas de toda índole que los partidos y las ideologías de la modernidad nos han traído a los países hispanos durante los dos últimos siglos.

En palabras de Javier Barraycoa, a quien publicamos en este número una importante declaración que hacemos nuestra, la Hispanidad no es un sentimiento, ni una ideología, por eso, aunque no sea todavía un ideal mayoritario entre los hispanos, está logrando paso a paso desenmascarar todas las construcciones falsas y mentirosas que se asocian a la leyenda negra. 

La Hispanidad, afirma Barraycoa, es Maestra, porque enseña que lo que ha sido posible puede volver a ser. Es una idea política, aunque no sepamos aún cómo podría llegar a concretarse. Y es una esperanza porque en medio de la crisis de la globalización se alza como una realidad emergente que solo necesita brazos dispuestos a su reconstrucción.  

No se trata de volver con nostalgia a tiempos pasados, se trata de construir, aquí y ahora, con los materiales de que disponemos. Y se trata de construir desde fuera del sistema. A lo que aspira en última instancia es a la unidad de las naciones hispánicas, pero el cómo haya de concretarse esa unidad -cultural, política, militar, monetaria...- queda abierto a la Providencia y tendrá que adaptarse, con sano realismo, a las circunstancias del momento.

El proyecto político de unidad hispana podría ir desde la pura amistad y cooperacion, hasta la confederación o integración en algún tipo de unidad política mas sólida. Lo importante ahora es cambiar la tendencia y aprender a sumar "materiales de construcción" vengan de donde vengan. No es realista pensar que esa unidad futura tenga que pivotar necesariamente en torno a Madrid. La "Españita" peninsular que constituyeron en el solar de la vieja Hispania los revolucionarios liberales en el XIX es ahora -por desgracia- una república bananera más, un pedazo de nuestra auténtica Madre Patria, aquella Monarquía Católica en la que no se ponía el sol.

En este contexto la revista Ahora información quiere ofrecer su humilde aportación a la causa de la Hispanidad. Su equipo de redacción, sus colaboradores, y la "empresa" editora que no es sino la antigua y gloriosa Comunión Tradicionalista, estaremos siempre en la vanguardia hispanista, y por ello permaneceremos cada vez más atentos para divulgar los ecos de este mismo ideal que nos lleguen desde cualquier país hermano. 

Editorial de la revista Ahora información nº 166 (Octubre-noviembre 2020)

1 nov 2020

¡Corrige! (Que Alguien Haga Algo nº46)


¡Qué importante es el cómo a la hora de corregir al otro! Incluso para corregirse a uno mismo habría que medir mejor las palabras... Cuánto más a la hora de pisar ese territorio sagrado que es la conciencia del vecino. Hay misericordia en el deber de corregir, por supuesto, y hay ocasiones en las que hay además urgencia, y se precisa energía. Pero también sucede que la intención de corregir queda en agua de borrajas cuando falta prudencia en la administración del correctivo. La receta para una buena corrección todos la sabemos: verdad, oportunidad, amor, proporcionalidad y petición de perdón. Son ingredientes que han de aplicarse en la dosis adecuada excepto el último, que nunca es suficiente por muchas disculpas que se soliciten por parte del corregido. 

En esencia el arte de la corrección está en saber distinguir el error del errado, el hecho condenable de la intención y hasta de la trayectoria del amonestado. Corregir bien es una tarea para cirujanos del alma, para personas humildes que sepan lo que hacen sin que ello les haga ensoberbecerse de su sabiduría. 

Hay tantas cosas corregibles en todo lo que hacemos que el mayor error de los correctores es no tener paciencia suficiente para seleccionar. Lucidez y ojo clínico para elegir en cada momento aquello que ha de ser señalado para su corrección. 

De todas formas hay que arriesgarse. A veces es peor dejar pasar los errores, los desequilibrios, las mentiras o las maldades que entrar a corregir como quien entra a matar. Pienso en la corrección y lo primero que se me ocurre es pedir que se haga en la forma correcta. Pero, al mismo tiempo soy consciente de una cosa: que la peor corrección es aquella que se deja de hacer. Las correcciones mal recibidas del pasado podrían llegar a ser las que con mayor ilusión se transmitieran a la generación siguiente. En caso de duda corrige. Corrige que algo queda.

El arte y la belleza

No es habitual que un discurso político o que una revista de análisis político se ocupen de un asunto como la belleza. Dentro del caos que han generado las ideologías parecería uno de nuestros menores problemas porque la opinión vulgar, alentada por las ideologías materialistas, tiende a identificar el arte y la búsqueda de la belleza como simples añadidos superfluos sobre el esqueleto de la civilización. Sin embargo una mirada recta que procure iluminar todas las realidades desde la fuerza del Evangelio tiene también la obligación de decir algo sobre el modo, la forma y el gusto de las cosas. 


El hombre es un ser espiritual, algo más que un conjunto funcional de células materiales. Toda cultura humana, si quiere prosperar o dar frutos, necesita llenar de alguna forma esas tres grandes aspiraciones que desde los tiempos de los viejos filósofos griegos llamamos bien, verdad y belleza. Nunca será posible en este mundo alcanzar la plenitud en ninguna de ellas, pero mientras la Tierra siga girando habrá civilizaciones, momentos y lugares de la historia, que se acerquen o que se alejen de esa triple vocación. Nosotros sabemos que solo la Verdad revelada es capaz de enseñarnos qué es la bondad y qué la belleza más auténticas. Sabemos de hecho por experiencia que nuestros ideales políticos y sociales se inspiran en realizaciones históricas más verdaderas, mejores y más bellas que el mundo moderno. Momentos históricos como el de la vieja Cristiandad, que no miramos con la tristeza de quien añora lo perdido sino con la esperanza de quien está decidido a repetir lo posible. Por eso, lejos de abrazar ninguna corriente esteticista, sabiendo poner el concepto de belleza en su justo término, estamos convencidos de la íntima conexión que une a esas tres caras que tiene el plan de Dios. Dostoievsky, el gran escritor ruso, afirmó que "El hombre puede vivir sin ciencia, puede vivir sin pan, pero sin belleza no podría seguir viviendo, porque no habría nada más que hacer en el mundo. Todo el secreto está aquí, toda la historia está aquí". Y es que la belleza es, al mismo tiempo, el resultado de las cosas bien hechas y el motor para querer hacerlas bien. 

En este número de Ahora información incluimos, entre otros muchos, varios contenidos relacionados con la búsqueda de la belleza en campos diversos. Con ello recogemos, de alguna forma, el guante que han dejado las jornadas del Foro Alfonso Carlos que estaban previstas para el pasado mes de septiembre y que en esta ocasión no han podido celebrarse. 

(Editorial de la revista Ahora información nº 167 (Noviembre-diciembre 2020)

25 oct 2020

¡Ordena! (Que Alguien Haga Algo Nº45)



A pesar de la marea informática de los ordenadores, el orden tiene mala prensa entre los progres porque recuerda la existencia de criterios inmutables que habitan por encima de la voluntad individual. La imagen del científico loco, o del artista bohemio, que necesitan del desorden para invocar a las musas está sobrevalorada. O, en todo caso, lo que vendría a demostrar es que el proceso creativo consiste en pasar del caos a la armonía, de las tinieblas a la luz, de la nada amorfa al orden limitado de las formas. No se puede ser siempre desordenado en todo: hay artistas autodenominados “de vanguardia” que renunciaron a ordenar todo aquello que producen excepto sus facturas y sus cuentas bancarias. 

En el ámbito social y político cualquier tarea rectora consiste también en ordenar las cosas. Por eso aquel que tenga verdadera vocación política procurará impulsar leyes que se ajusten a la razón más que a la voluntad caprichosa de la moda, el sentimiento o la masa. Pero atención porque el orden de cada cosa no tiene por qué ser un orden matemático, cuadriculado o simétrico. El desorden aparente de una familia numerosa no es tal cuando, al final, consigue dar a cada uno lo suyo. Orden no significa igualdad sino jerarquía, escala de valores, graduación de los bienes y de los males, respeto máximo hacia el transcurrir complejo de la vida misma. Una sociedad que, llegado el caso, fuera capaz de sublevarse anárquicamente contra la tiranía demostraría ser más ordenada que otra que, en sus mismas circunstancias, se contentara con ser un cuadriculado cementerio, una comunidad momificada, perfecta, inútil y estéril. 

“El orden ahorra tiempo, ayuda a la memoria y conserva las cosas”, este sabio consejo, bordado y enmarcado, debería estar siempre bien visible en todo hogar o empresa decente.  Ordenar es algo que podemos hacer en cualquier circunstancia. Cualquier momento es bueno para ordenarse la vida, los horarios, las costumbres, las ideas; para ayudar al orden en la comunidad más próxima; para ordenar después a otros facilitando el milagro de la obediencia; para ser, en fin, hijos reconocibles de Dios creador.

24 oct 2020

Moción de censura a la partitocracia



Acaban de emitir en la tele un "reality show" llamado "Moción de Censura". Ha sido interesante porque ha puesto de manifiesto, una vez más, qué es lo que puede dar de sí este sistema político que llamamos partitocracia. Esto de censurar al mal gobierno está muy bien. Era necesario. Pero la próxima moción de censura habría que hacerla contra el sistema. O sea, contra la Constitución, la falsa monarquía, los partidos y sus ideologías.

Hay quien prefiere tomárselo a broma asumiendo que el Parlamento es un teatro, pero el hecho de que los partidos hayan convertido la política en un enfrentamiento teatral es un gran problema. Y es un problema porque debajo de esos aplausos y esos discursos llenos de autobombo, chulería y faltas a la caridad, se esconde un sistema tiránico y corrupto. Sí, la corrupción no son casos aislados sino el funcionamiento habitual del sistema de partidos. Un sistema que necesita matar el alma de España para medrar alimentándose de su cadáver. Un sistema ladrón que no respeta a los españoles.

La corrupción no son solo las tarjetas black, o la caja B, o el desvío de los fondos del paro. También es corrupción el currículum sorprendente de los políticos profesionales así como su convicción declarada de que los partidos son empresas y los políticos sus empleados. También son corrupción los impuestos abusivos, y las multas recaudatorias, y las leyes inmorales.

En este sistema todo resta. Los partidos parten. Sustraen energías al cuerpo social y son correas de transmisión de quienes les financian desde el extranjero. Todos los partidos al final, por encima de sus muletas ideológicas, responden al mismo esquema porque son la puerta de entrada para los intereses que se dedican a mangonear en las cosas de España. Son los hilos con los que otros nos manejan y vacían de sentido la palabra soberanía. Los partidos políticos institucionalizados deberían estar prohibidos. Son un invento de la revolución francesa - de la Revolución- para cumplir con sus objetivos en forma de carrera de relevos. Los partidos, los bandos, son inevitables en las guerras civiles. Fuera de ahí solo representan la corrupción del cuerpo social y la puerta de entrada para los enemigos externos.

Por eso no es buena idea la de utilizar un partido político para enfrentarse a los partidos políticos. Es una tentación que también nos ha afectado a los carlistas. Sin embargo el Carlismo ha sido mas de partidas que de partidos. Y cuando más allá de una organización política hemos querido ser un partido y entrar en el juego del sistema hemos perdido nuestra esencia y sido parte del problema.

Pero volvamos a la puesta en escena del circo parlamentario. Los insultos que se reparten unos a otros no son insultos. Si al menos hubiera en estos actores alguna expresión de auténtica ira, algún pronto... eso sería un gesto de humanidad. Lo que hay es puro teatro, pura partitocracia. Así funcionan los partidos, con la bronca permanente, el menosprecio como gesto habitual y la representacion de unos papeles acartonados. 

En definitiva, en esta última moción, Casado lo tenia muy fácil. Le bastaba con abstenerse y decir "Mira, Abascal, tienes razón en que este gobierno es un desastre, pero tú tampoco me gustas". Eso lo habrían tragado el 90% de sus asustadizos votantes. Pero no, eso era mucho pedir. La partitocracia es destructiva. Corroe el sentido común. Ciega el orgullo. Mata la empatía. RiP PP.

21 oct 2020

El Santo Padre y la "defensa de Dios"



Vuelven algunos a ponerse un poco nerviosos por culpa de frases entresacadas de un documento pontificio. La encíclica Fratelli Tutti, como cualquier otro documento papal, podría trocearse en miles de tuits y dar lugar a lecturas absolutamente contradictorias. Tengamos cuidado con esas lecturas sesgadas y con la manipulación constante a la que se somete cualquier texto eclesial. Es importante leer estas cosas en su conjunto, entender quién es el destinatario de cada mensaje y saber darse por aludido sólo cuando corresponda. 

En cualquier caso -y esto sirve para cualquier polémica de las que suelen acompañar cada vez más a los Papas en estos tiempos- diga lo que diga o haga lo que haga el Obispo de Roma recuerden que la palabra "Papa" significa padre y que no está bien alborotarse o mucho menos menospreciar o ridiculizar sus enseñanzas. En ningún caso. Como dice el Libro del Eclesiastés 3, 2-6: "aunque chochee". ¿Que oímos o leemos algo que no nos cuadra? No pasa nada, vayamos al Magisterio, acudamos a la Tradición perenne y no nos equivocaremos. 

En el punto 285 de su reciente encíclica, el Papa se refiere a cierta declaración compartida con un importante clérigo musulmán. En ese párrafo afirma: "En efecto, Dios, el Omnipotente, no necesita ser defendido por nadie y no desea que su nombre sea usado para aterrorizar a la gente". Yo, desde luego, como cristiano, español y carlista no me siendo aludido por esta advertencia, y pienso sin embargo que sí resulta un aviso muy oportuno dirigido al islamismo radical. 

Nosotros, los carlistas, a pesar de nuestros himnos y de nuestros lemas, no luchamos "por Dios" en sentido literal. Eso es lo que quiso hacer el bueno de San Pedro cuando sacó la espada en Getsemaní y el mismo Jesús se lo impidió recordándole que, si lo hubiera querido, habría tenido legiones de ángeles a su servicio. Nuestra lucha es más bien como la de los santos Macabeos: es una lucha por la Religión, por la civilización cristiana, por nuestra Tradición. Si se puede decir que salimos "en defensa de Dios" es en tanto que lo hacemos en defensa de nuestros hermanos, de los pobres y de los débiles recordando aquello de "... a Mí me lo hicísteis". Salvando errores y pecados que no hay por qué ocultar, podríamos afirmar que los españoles defensores de la España tradicional, siempre que hemos tomado las armas lo hemos hecho con espíritu defensivo, para luchar contra el invasor o contra el usurpador; nada que ver por tanto con la yihad de los musulmanes o con las guerras imperialistas de las ideologías o de los tiranos. 

Nos hierve la sangre estos días viendo las imágenes de templos en llamas que nos llegan desde Chile. La excusa de una protesta política contra el gobierno, el recurso a señalar estos hechos como casos aislados, obra de exaltados, no pueden ocultar que el objetivo último de las ideologías hegemónicas es acabar con la Civilización cristiana, el último bastión que impide la destrucción de la naturaleza del hombre. No es la primera vez que la Revolución descubre su lado satánico con la quema de iglesias. Ni será la última. Todo parece indicar que llegan tiempos recios para los que tendremos que prepararnos en cuerpo y alma. Defendiendo los templos, y a la vez cuidando el espíritu para que no se nos contagie la espiral del odio.

16 oct 2020

¿Yanquis go home?


Los ambientes más conservadores -esos del "Virgencita, que me quede como estoy"- andan preocupados ante la posibilidad de que el Tío Sam decida trasladar a Marruecos las bases militares que tiene en suelo español. Temen que el alejamiendo del gran policía global pueda favorecer o acelerar la instauración en Madrid de un régimen bolivariano. 

¿De verdad que no tenemos más remedio para vivir en paz que seguir bajo la bota colonial? USA, quien quiera que sea el que se esconde detrás de esa marca -que no es Trump-, lleva muchas décadas mangoneando en las cosas de todos los países hispanos, incluidas las de esta España ibérica nuestra. O sea, que ya somos Venezuela. 

USA es una estructura plutocrática que se mueve al compás de las ideologías, no es ningún apoyo seguro. Recuerden que fue USA quien pilotó en gran medida la Transición, con golpes de timón a su estilo como el asesinato de Carrero o el Montejurra 76. Fue USA la que creció con el robo y la invasión en Norteamérica, en el Caribe y en Filipinas. Es USA la que considera a México su patio trasero. 

Esa cosa llamada USA -que, insisto, no es Trump precisamente- es lo que nos ha convertido a todos los hispanos en repúblicas bananeras. "Creen que la vida es incendio, que el progreso es erupción, que en donde ponen la bala el porvenir ponen... ¡no!". Tenía razón Rubén Darío cuando alentaba con sus versos a los "cachorros del león español". Tenemos que liberarnos de los fanáticos de izquierda, claro que sí, pero sin olvidar que tienen razón -y por ello triunfan- cuando claman contra el imperialismo yanqui. 

2 jun 2020

Lo más antiespañol: una Españita centralista


El globalismo (al menos así estaban las cosas antes del virus) quiere dar por amortizados a los estados-nación. es evidente que se sirve de los partidos que infectan las regiones para dinamitarlos desde dentro. Sin embargo me parece un error no saber  distinguir entre "las regiones" y los políticos egoístas que las mangonean. 

Un eurodiputado español, de derechas, dijo allá por febrero que "El regionalismo es una estrategia para disolver las naciones y está impulsado desde la propia UE para debilitar a los estados". 

La verdad es que no entiendo por qué quienes más presumen de españoles andan siempre copiando todo lo que venga del mundo anglosajón o de Francia. No hay nada más hispano que el regionalismo. No hay nada más antiespañol que el centralismo.

La Hispanidad se forjó como una monarquía plural. Pueblos hermanos unidos en un proceso federativo no uniformista. Reducir España a un paisito peninsular homogéneo, a una más en el conjunto de las pequeñas repúblicas bananeras en las que se disgregó la Monarquía Católica es lo que siempre quisieron nuestros enemigos. Es por tanto lo más antiespañol. 

Yo también estoy harto de los mezquinos nazionalismos separatistas. Soy navarro y sé de qué hablo. Pero creo que un político responsable, y más si pretende ir de super-español por la vida, no puede desear para nuestra Patria el modelo afrancesado. Con eso solo consigue echar gasolina al fuego. 

España necesita sustituir la tentación globalista por la realidad viva de la gran patria hispana. Y necesita asimismo hacerse fuerte desde abajo, desde sus municipios y sus regiones. Hay que acabar con las autonomías, sí, pero para liberar a las regiones, no para darlas por perdidas.

1 jun 2020

La historia de España en un tuit

Nuestro sino es luchar por Cristo, contra un "reino-de-cristo-sin-cristo" que a veces se llama Islam y a veces comunismo

Y luchar asimismo contra los que allanan el camino a la tiranía. Esos que antes se llamaron witizanos y hoy liberales.

---

Díganme qué episodio de nuestra historia no está contemplado en ese resumen. España nació en los concilios de Toledo. Antes solo había unas provincias de Roma, o una Península caótica. En Toledo nació un proyecto, una misión. Esa misión es la que nos hizo ser lo que somos. Y así fue como, cuando nos dejaron los traidores (witizanos, liberales, etc.) y los fanáticos (islamistas, comunistas, etc.), construimos una civilización, la Hispanidad.

31 may 2020

Abel Azcona y la leyenda negra



Abel Azcona, ese famoso loco que se ha especializado en divertir a los malvados, aquel que conocimos en la exposición sacrilega de Pamplona, ha lanzado una campañita presuntamente artística insistiendo en la vieja y cansina leyenda negra antiespañola. Bajo el lema "España os pide perdón" dice que quiere "abrir un debate en América latina". Pues bien, abrámoslo para impugnar a un moderador que ensucia todo lo que toca. Sé que hago publicidad de este individuo entrando al trapo, pero de perdidos al río. Esto es lo que le he escrito en twitter: 

Hola Abel, viejo amigo, eres un artista de la provocacióny por eso es normal que la gente normal te ladre y hasta te muerda. Lo has conseguido una vez más ¿Y ahora qué? A mí lo que me hace gracia de los progres como tú es ver cómo desprestigiáis vuestras propias ideologías al mezclarlas todas. 

Podrías contentarte con ser aberrosexualista, pero necesitas demostrar que eres antiteo. Podrías limitarte al feísmo en tus montajes, pero no puedes resistirte a declararte pro-muerte. Podrías ser vegano, transhumanista y loco, pero no tenías necesidad de defender la leyenda negra. 

Cada vez que aireas una de tus deyecciones provocas el enfado de la gente normal y el alborozo de los progres más rotos. A lo mejor crees que haces un servicio a la libertad pero solo lo haces a los malvados que desean una sociedad partida en dos bloques irreconciliables. 

Eres el bufón del diablo. Das mucha pena Abel. Arrepiéntete antes de que sea tarde.  

La verdadera guerra



San Millán, ruega por nosotros*

La verdadera guerra que ha destruido Occidente es la guerra revolucionaria contra la tradición. El ruidoso enfrentamiento entre la derecha liberal capitalista y la izquierda marxista es un episodio menor y seguramente acabará pariendo un régimen de consenso al estilo chino.


El que finalmente gane, ese será nuestro mayor enemigo. Nosotros, los carlistas, estaremos en contra del vencedor, sea quien sea. 

La vieja cristiandad ha sido aniquilada. Quedan pequeños núcleos de resistencia que serán lo que Dios quiera, cuando Dios quiera. El grano de mostaza. La levadura. La sal. Los panes y los peces. Piedras para sacar hijos de Abraham. No tiene sentido que nos desgastemos más de la cuenta tomando partido en los rifirrafes de izquierdistas contra derechistas. 

Unos y otros tratarán de ganarnos para su causa. Pero haremos bien en reservarnos para la siguiente Reconquista, cuando de verdad vayamos a luchar por amor y no por miedo. 

Me dicen que esta estrategia es errónea, que nos lleva a la invisibilidad, a la marginalidad, que sería mejor juntarse con los conservadores, con la derecha liberal, con los libertarios, con los nacional-sindicalistas... Yo respondo que nuestra estrategia consiste en hacer lo que hay que hacer. Insisto en que no hay que luchar por miedo así que, con todo mi respeto a las buenas intenciones, diré que muchos de esos partidos, el ultraderechismo en general, no es más que una respuesta provocada por el miedo a los rojos, contaminada de las mismas viejas ideologías y que no profundiza en la Tradición. 

Queda la incógnita de nuestro viejo adversario, el Islam. Los musulmanes son ahora los nuevos proletarios. Crecen en Europa porque son casi los únicos que tiene prole. ¿Se enfrentarán con el Occidente progre igual que lo hacieron antaño con la Cristiandad? No lo creo. Más bien pienso que acabarán siendo domesticados. Porque la izquierda marxista y el Islam en realidad se parecen bastante. Ambas son herejías del cristianismo que buscan un "reino de Cristo" sin Cristo. Se que esto no sonará demasiado optimista, pero en mis peores pesadillas me imagino un enemigo futuro que junta lo peor de cada casa. Como una mezcla de China, Holanda y Arabia saudita.

Así que mucho ánimo, mucha paciencia, y mucha ilusión. Porque la historia no está escrita. Solo el final, y acaba bien. 


****************************************
Mención en HISPANIDAD.COM
**************************************

* Por cierto, el caballero de la imagen no es Gandalf. ¡Es San Millán! 

22 mar 2020

Unidos, sin partidos, rezando. Y sin caceroladas

Desde que comenzó esta crisis sanitaria llevo oyendo teorías de la conspiración a cual más peregrina. Que si los chinos, que si la CIA, que si un plan de eutanasia globalista para matar a los viejos y quitarnos la Santa Misa... Son teorías contradictorias unas con otras... Explicaciones incompletas que se suman al rifi-rafe partidista de siempre, multiplicado ahora por cien.

Todo ello son sombras que se superponen a las tinieblas, oscuridades que no ayudan. La verdad es una, no me cabe duda. Y algún día todo se acabará sabiendo: el origen del brote, los ocultamientos y las chapuzas, los intereses inconfesables y las incompetencias... Pero a mí ahora no me interesa lo más mínimo ver esa película, ni saber si lo que nos amenaza son galgos o podencos.

Ahora es el momento de la auténtica unidad. La de los hombres de buena voluntad, la de quienes renuncian a las banderías y a las jugadas partidistas para salir de esta pandemia de la mejor manera posible.

Porque lo que tenemos ahora en juego no es el colchón de Pedro Sánchez, ni una convocatoria de premios al mejor gestor de la crisis. Ni siquiera es lo más importante saber si la hegemonía mundial acabará siendo deTrump o de Xi Jimping.

Lo que nos jugamos con el coronavirus es la vida de miles de abuelos, bibliotecas andantes, un eslabón de nuestra misma identidad. Pero también la vida misma del tejido social. Ese ecosistema de los cuerpos sociales naturales que lleva dos siglos bombardeado por las ideologías liberales y que ahora está a merced de un estado orwelliano. Queríamos individualismo y ya tenemos prohibido el abrazo. Queríamos eutanasia y ya tenemos la muerte más indigna. Queríamos un mundo sin Dios y lo hemos conseguido. Queríamos seguridad y al fin hemos logrado que la delincuencia se reduzca a mínimos históricos. ¿Era esto lo que queríamos? ¿No? ¿Cómo haremos entonces para salir de aquí con el menor daño posible?

Mi respuesta es clara: unidos y rezando. Sin quejas y sin caceroladas. Entiendo el cabreo de muchos con los partidos del gobierno, que ni siquiera en una crisis como esta han sido capaces de soltar el lastre de sus ideologías; entiendo el hartazgo que producen los monólogos cínicos y caraduras de Pedro Sánchez. Pero es que Sánchez ya era así antes del COVID-19. El personaje es ya conocido. No necesitaba una gran crisis sanitaria para descubrir su cinismo y sociopatía. El problema es que detrás de Sánchez y de Iglesias hay muchos compatriotas abducidos y el rencor crece con cada cacerolada. Por eso, si de verdad queremos cambiar la tendencia guerracivilista que nos amenaza debemos actuar de una forma distinta. Esta crisis era una ocasión de oro para unirnos todos los españoles como nunca. Sería muy irresponsable dejar pasar este momento. Sería criminal. 

Por eso termino animando a que sepamos al menos aprovechar esta crisis para crecer. Y para prepararnos bien para lo que vendrá después.

No entremos en partidismos suicidas, manías conspiracionistas ni quejas inútiles. Busquemos la unidad y construyamos lo que otros destruyen. Todo esto parece nuevo... pero no lo es: la lucha es la de siempre.

*******

Apostilla sobre las caceroladas:
Si las caceroladas fueran solo contra los políticos estupendo. Pero son de una parte de los españoles contra otra parte. Ahora no podemos alentar eso. No debemos ser como ellos.
No pretendo imponer mi opinión pero tengo la convicción de que el papel del Carlismo no puede ser en este momento el de sumarse a la queja ni alimentar el cabreo. Para eso ya están otros.

27 feb 2020

¡Adoctrina! (Que Alguien Haga Algo nº43)

Fíjense en lo que voy a decir: hay que adoctrinar a los niños. Eso es lo que hay que hacer. Porque lo que  los niños necesitan no son dudas, incógnitas, vacíos ni superficialidades. Lo que tienen que darles sus mayores, sus padres principalmente, es doctrina. Certezas, cimientos, respuestas y pensamiento fuerte. Sólo así es como podrán desarrollar un espíritu crítico. La peor amenaza a los niños y a las escuelas no es que se les adoctrine, sino el hecho de que los políticos progres lgtbp pretendan hacerlo a su estilo.

La doctrina es el alimento del alma. Los malos alimentos no se combaten con hambre sino con alimentos buenos. Las doctrinas perversas no se frenan con el vacío imaginario de los liberales sino con la sana doctrina.

Adoctrinar a los hijos es lo que cabe esperar de un buen padre. Es normal que un caníbal adoctrine a sus hijos en el canibalismo. Es posible que el considerar a sus hijos dignos de adoctrinamiento sea lo único bueno que haga. Porque lo malo es su canibalismo, no su paternidad.
Adoctrinar es, al fin y al cabo, una forma de alimentar. Es la forma ordinaria que -salvo casos parapsicológicos de ciencia infusa- utilizamos los seres humanos para amueblarnos el cerebro, y para ordenar la conciencia. Sin adoctrinamiento no hay ser humano, no hay tradición, no hay crecimiento social sino pura animalidad, puro instinto genético. Por eso, cuando uno deja de adoctrinar sucede que viene otro para llenar el vacío. Si hiciéramos caso a aquellos ingenuos que nos previenen “en contra de todo tipo de adoctrinamiento” estaríamos condenando a los jóvenes al engaño de las ideologías, y a la programación de aquellos que no les aman.


24 feb 2020

Letreros farisaicos

De un tiempo a esta parte se colocan en las entradas de muchos pueblos y ciudades letreros de color rosa o morado con la leyenda: "Este pueblo no tolera las agresiones sexistas" o alguna similar. No está mal. Pero este mandamiento apenas abarca una parte del sexto de los que exige la Ley Divina.

Antes, cuando la gente no necesitaba ser progre para saber si estaba actuando conforme a los principios morales o no, cada ciudad tenía un crucero a su entrada. Un crucero, un humilladero, un calvario, un cruceiro... Era el recordatorio de que había no medio sino diez mandamientos en los que los vecinos manifestaban su rechazo total y radical a las agresiones lujuriosas así como a todas las demás obras del demonio.

Es muy posible que dentro de poco al cartelito contra la lujuria se añada otro exigiendo el respeto al medio ambiente, o sea, lo que vendría a ser una parte de las exigencias que encierra el cuarto mandamiento judeo-cristiano. Y así, poco a poco, si nos ponemos optimistas, podríamos soñar con que llegará un día, seguramente lejano pero posible, en el que las entradas de las ciudades sean un bosque de preceptos. Más parecidos a un código fariseo que a la sencillez del Evangelio que, en un alarde de síntesis, resumió hace dos mil años todos los mandatos y todo el código penal en una frase: "Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a tí mismo".

12 feb 2020

Segunda tertulia en Radiocadena Española. 12 de febrero de 2020

Hoy he intervenido por segunda vez en Radiocadena Española, en la tertulia La Ratonera dirigida por Santiago Fontenla.

Hoy hablamos de:
- eutanasia
- rebaja en las perspectivas de crecimiento económico de España
- problemas en el congreso del Móvil de Barcelona por el coronavirus
- visita de don Felipe a Trump
- elproblema de la estructura insostenible del estado español

El programa se emite a las 07:00 y se repite a las 10:00 h.

Se puede escuchar en formato Podcast en cualquier momento

https://www.spreaker.com/user/radiocadena/laratonera1202

LA RATONERA

7 feb 2020

Presentación de Babelicismos en Pamplona

El viernes 7 de febrero presenté mi último libro en Pamplona, y tuve el honor de hacerlo en el aula magna del Seminario Conciliar de San Miguel, acompañado por el director de La Verdad, don Alfredo Urzainqui. Como no sabía muy bien qué decir me animé a escribir un nuevo "babelicismo". El número 101. Es éste:

_____________________________

PRESENTACIÓN:

Si un libro es como un hijo una presentación es como un bautizo. No entraré en terrenos pantanosos para dilucidar si sería mejor compararla con la circuncisión de los judíos, o con la presentación en el templo. Digamos simplemente que se trata de compartir una alegría. Atrás quedaron el doloroso parto y las molestias de la gestación. Ahora solo queda la satisfacción de que este hijo, con todas sus imperfecciones, ha tomado vida propia. Vida más larga en esta tierra que la breve y trabajosa de su pobre autor mortal. Y esa alegría es la que se quiere compartir.

Las presentaciones son muy importantes. Siempre he pensado que hay libros para los que su presentación es más importante que su mismo contenido. En parte por aquello de que la primera impresión es la que cuenta. Pero también porque a veces no existe nada más allá de esa primera impresión. Libros, como todo el mundo sabe, los hay de todas clases. Hay libros, como la Biblia, que tienen una presentación todos los días. Es lo que llamamos "liturgia de la Palabra". Los grandes libros admiten una presentación para cada una de sus páginas. Otros, en cambio, sospecho que son libros en blanco, libros que solamente tienen una portada, y una cubierta de diseño. No puedo demostrarlo, pero estoy seguro de que existen libros que nadie ha escrito y que nadie leerá. Pero son libros que tienen su presentación, por supuesto. Porque una buena presentación vale más que mil palabras. Cualquier libro la agradece, aunque no la merezca, y da igual que sea una tesis, que una recopilación de articulitos, que una sarta de chistes. Los libros, como las especies en la cabeza de Darwin, ayudan a la evolución del espíritu humano, constituyen ecosistemas que tienden al equilibrio y que se basan en las relaciones que establecen a lo largo de la cadena trófica los libros gordos, los medianos y los ligeros. Con una salvedad: en el mundo de las letras la cadena funciona al revés que en los océanos. Las grandes ballenas literarias son el alimento de los libros intermedios. Y estos a su vez, constituyen el nutriente del pequeño plancton. 


Las presentaciones son además fundamentales para el alimento de la vida social. Cuando no había internet eran lo que sostenía la cultura de los pueblos. Aun hoy siguen siendo un momento privilegiado para hablar de cosas distintas a las tediosas anécdotas del telediario. Los bautizos, los funerales, las presentaciones... tienen todos estos eventos una parte de acto social que nos mantiene con vida porque en ellos hablamos de la vida y de la muerte, y aprovechamos para recapitular las trayectorias de nuestros coetáneos. Aunque a uno no le apetezca asistir sabe que es su obligación, como quien reconoce que necesita de vez en cuando una transfusión de sangre. 


En las presentaciones, conforme se va uno alejando de la fecha de edición, se mezclan entre el público asistente quienes han leído la cosa presentada y quienes aguardan el momento propicio. Momento que todos sabemos que nunca llegará para algunos. Los autores de novela, -perdón, los autores de novelas- tiemblan ante la posibilidad de que la indiscreción de los lectores adelantados descubra el final de la trama a los ingenuos. Los autores de retales y ocurrencias no sufrimos por eso. Sabemos que nadie va a ir por ahí contando cien finales. (No se si se habrán dado cuenta, pero ya estoy terminando el párrafo sin haber dicho esa cosa horrible de "hacer un espoiler". Vaya... ya lo he dicho).

Una buena presentación debe comenzar, en fin, con una acción de gracias. Es lo que se espera de un autor considerado. Que dé gracias a la familia que ha soportado sin asesinar al autor los ratos de ausencia física y mental que conlleva la creación literaria. Gracias al inspirador, al editor, al mecenas, al corrector, al prologuista, al diseñador gráfico, al distribuidor, al librero... funciones que a veces, se reúnen casi todas a la vez, en las mismas espaldas de un autor desconocido. Son tantas las pequeñas facetas y faenas que intervienen en cualquier proceso creativo, aunque sea en la creación de un humilde librito que a veces, lo que más se agradece, de corazón, es no molestar. Y cuando digo esto me viene a la cabeza, no sé por qué, ese típico grito sanferminero que dice: "Dejen trabajar a los dobladores".  Decía que una buena presentación debe comenzar con una acción de gracias. Aunque también podría terminar así. Para que esta sea la última palabra que quede flotando en torno al nuevo libro recién nacido: ¡gracias!

5 feb 2020

Tertulia en Radiocadena Española. 5 de febrero de 2020

Hoy he intervenido por primera vez en Radiocadena Española, en la tertulia La Ratonera dirigida por Santiago Fontenla.

Hoy hablamos de:
- Las estadísticas del paro.
- La crisis del coronavirus.
- El Pin Parental y la versión aún más floja del PP.
- Elecciones en Estados Unidos. Los caucus de Iowa.

El programa se emite a las 07:00 y se repite a las 10:00 h.

Se puede escuchar en formato Podcast en cualquier momento aquí:
https://www.spreaker.com/user/radiocadena/laratonera0502 

LA RATONERA






4 feb 2020

Estética bolivariana en La Moncloa


No se... A lo mejor soy un conspiranoico pero con la que está cayendo sobre Venezuela, y conociendo de qué va el totalitarismo y la importancia que esta gente da a la puesta en escena... No me resulta casual la coincidencia en el decorado de estas ruedas de prensa. Solo falta que la ministra se deje bigote.

En la Moncloa hay al menos 500 asesores. 500 personas para quitarle la caspa de los hombros a Sánchez y cosas de esas. Zapatero llegó a tener 641 asesores. ¿No van a cuidar hasta el último detalle? La imagen que transmiten nunca es casual. Eso es lo más importante para ellos. Si yo, que estoy trabajando, he perdido unos minutos comparando y compartiendo estas dos fotos imaginen a 500 personas que tienen 4.000 horas cada día entre todos para hacer sus cosas. El parecido de las banderas no es casual.

¡Filosofa! (Que Alguien Haga Algo nº44)




O lo que es lo mismo, piensa. Pero no en las nubes, no en el mundo de las ideas etéreas. No en los reduccionismos flotantes que derivan en ideología. No en soluciones perfectas como figuras matemáticas. La geometría no existe. Camine usted por un paisaje real cualquiera y entenderá cómo es más fácil encontrarse con un fantasma que con un octaedro. Somos alma y somos cuerpo, una extraña mezcla de lógica y corazón. Y el mundo de lo que las cosas son es un conjunto de seres en crecimiento, aún inconclusos. La lógica es una parte de la filosofía, pero no es toda la filosofía. Es una herramienta y ha de aplicarse primero en la tarea de atarnos con el origen antes que desperdiciarla construyendo castillos en el aire.

Cuando dijo Dios que todo era bueno no dijo que fuera perfecto. La filosofía perfecta hace daño, como un zapato sin curvas. La filosofía verdadera en cambio se adapta siempre a nuestras necesidades vitales porque no tiene límites. Porque siempre será posible descubrir algún nuevo misterio, reencontrar cualquiera de los hilos que nos conectan con las raíces de todo.

Dicen que la educación moderna no enseña a los niños a filosofar porque no anima a descubrir de dónde vienen las cosas. Si la leche sale de la nevera y las respuestas de google... ¿para qué quiero saber más? Es lo que tiene vivir de rentas y descuidar el agradecimiento a nuestras raíces. Por eso es tan importante la filosofía, porque despierta en nosotros la curiosidad sobre el porqué de las cosas. Filosofa. Piensa. Lee a los que pensaron antes que tú. Esa manera de entender tu paso por el mundo te convertirá en un ser más lúcido. Y más agradecido.

28 ene 2020

¿Cuántos años NO tienes?


Desde pequeñitos se nos ha enseñado a contar los años vividos como años ganados y no gastados. Cuando alguien nos pregunta ¿cuántos años tienes? solemos responder invariablemente diciendo el número de los años pasados, esos que ya no volverán. Se tienen recuerdos. Sí. Y se pueden tener experiencias acumuladas, esas que conforman la memoria de los sabios. Sí. Pero la verdad es que sería mejor responder a esa pregunta que tener, lo que se dice tener, ninguno. Tendremos, para servir a Dios y a usted de aquí en adelante, los que Dios quiera. Ni uno más ni uno menos. Porque está escrito que nadie, a fuerza de agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de su vida. Y porque los años pasados, esos que nunca volverán, ya nadie los tiene en ninguna parte. El "que me quiten lo bailao" es un consuelo estúpido, si perdiste en tonterías el tiempo precioso que ibas teniendo arrepiéntete. Y si lo invertiste en cosas buenas tampoco lo tienes, así que no te engrías. 

24 ene 2020

La batalla del pin: hay que apuntar más alto

Podríamos decir con Chesterton que la autoridad del estado sobre las familias puede ser invocada en los casos de familias anormales. Ahí es donde el estado, si quisiera y pudiera hacerlo, podría ayudar a muchas familias. Nuestro problema es que ahora lo más anormal es el estado. Porque el estado del estado, -como dirían los luthiers- es un estado lamentable.

El plan de la Revolución es simple y descarado: abortemos a todos los niños que podamos y eduquemos a los supervivientes. Dicho así, a lo bruto, suena conspiranoico, como siempre que terminamos hablando de "ellos" sin determinar quiénes son exactamente esas mentes capaces de tan tremendas maldades. Y sin embargo los hechos son los que son. No hace falta demostrar que las mismas corrientes de pensamiento, los mismos periódicos y televisiones, los mismos políticos que promueven el aborto denominándolo salud reproductiva son los mismos que luchan con todas sus fuerzas por acabar con la patria potestad y el derecho primordial de los padres a educar a sus hijos.

La salida de la ministro progre abortista Celaá y la de todos sus corifeos ha sido asombrosa por el descaro con el que han respondido a una medida tan básica y de sentido común como el llamado pin parental. En su argumentación, histérica e ilógica, han pasado del "es mi cuerpo" al "los hijos no son de sus padres" sin despeinarse. Pero si los hijos no son de los padres (que es verdad porque lo que es de los padres es el derecho a educarlos) entonces ¿por qué los abortan diciendo que son suyos?

Lo que tendría que haber dicho la ministro es que los hijos no son de los padres, lo que es de los padres es la responsabilidad de su cuidado y por eso no pueden abortarles. O que los hijos no son de los padres, lo que es de los padres es la responsabilidad de educarles y por eso no pueden permitir que asistan a unas enseñanzas aberrosexualistas. 

Resulta curioso leer que en las escuelas británicas son los musulmanes quienes están logrando eliminar talleres LGTBP gracias a mantener intactos algunos principios de derecho natural. ¿Y en España? ¿Tendrán que sacarnos las castañas del fuego los marroquíes?

De todas formas lo más llamativo de esta "batalla del pin parental" es la aceleración del proceso y el descaro con el que la izquierdona arrincona cualquier tímida reacción de la derechona. Por su parte, los que en teoría dicen defender la libertad han apuntado el tiro tan bajo con eso del pin que al final va a quedar en nada. Se han quedado cortos. Lo que tendrían que haber hecho es apuntar más alto. Cuando haya políticos que exijan que no haya corrupción aberrosexual en los colegios, para ningún alumno, entonces sí tendremos un debate mucho más productivo. Por el mismo precio los políticos conservadores podrían haber exigido una limpieza general para dejar las escuelas libres de aberrosexualismo. Les aseguro que la respuesta del rojerío no habría sido más histérica que la que están teniendo. ¡Pero si hasta han llegado a pedir la aplicación del 155 para Murcia!

Pedir el pin o, más concretamente, pedir que el pin sea aceptado por el profesorado para que determinados niños puedan dejar de asistir a las charlas y talleres aberrosexualistas está bien, no digo que no, pero para pedir eso no hace falta ser político. Eso lo puede hacer cualquier padre responsable. Y cuando el cole no haga caso los padres, la familia, siempre pueden plantearse la insumisión. Todo eso sirve para que un padre proteja a sus hijos. Pero un político decente tendría que tratar de proteger a todos -no solo a sus hijos- y exigir algo así como un "pin patriótico". Porque si no quieres mierda para tu hijo no la toleres para los demás ¿no?.

Entonces, ¿cuál es la propuesta realizable que pediría? Muy sencillo. Para los padres: pin, objeción o insumisión según convenga en cada caso. Para los políticos: que utilicen sus altavoces y sus votos para denunciar la presencia de corruptores de niños en los colegios. ¿Por qué no lo hacen? ¿Por qué no empiezan la batalla un poco más arriba? Porque la cobardía de la derechona es paralela a la sobreactuación y la jeta de acero de la izquierdona. Así ha sido toda la vida. 

Estas cosas pasan cuando se pierde el concepto de Revolución, cuando no se entiende que hay algo más gordo detrás de algunos políticos radicales y caprichosos. Y con la Revolución no se puede negociar. Es inútil ceder o dialogar. No hay que pasarles ni una. Hay que negar la mayor. A todos esos políticos e ideólogos progres habría que decirles, por ejemplo:

– que el estado no tiene que organizar la enseñanza

– que el ministerio de educación debe desaparecer

– que los padres son los responsables de la educación

– que los niños tienen derecho a rezar en el colegio y a que se les hable de Dios en cualquier asignatura

– que las ideologías aberrosexuales tendrían que estar prohibidas

– que hay que recuperar el delito de corrupción de menores

– etc.

¿Existe algún político que diga todo esto?

Bueno, aquí hay uno.